La permanencia del Senado, el rol de los partidos, el Tribunal Constitucional y el BC marcarán el debate y votación del pleno. En paralelo, la comisión de Medio Ambiente y Modelo Económico revisará las indicaciones e iniciará la elaboración de los siguientes dos informes, que incluirán el debate sobre la economía y el nuevo paradigma.

El viernes 25, mientras el pleno de la Convención votaba el informe de reemplazo y la segunda propuesta constitucional de la comisión de Medio Ambiente y Modelo Económico -que logró aprobar siete artículos-, un grupo de convencionales de todos los sectores seguía en tratativas urgentes en otro de los pisos de la sede del Congreso en Santiago, para intentar llegar a un acuerdo de última hora sobre el Sistema Político que regirá al país. La definición será clave, afirman en privado, para el ambiente en todas las votaciones que sigan.
Los principales nudos que traban un entendimiento pasan por las funciones que tendrán las Cámaras -con la incertidumbre puesta en la permanencia o continuidad del Senado, y bajo qué términos-, el rol de las nuevas Asambleas Regionales -que ya están en el borrador de la Constitución-, el perfil, derechos y atribuciones de los partidos políticos -y su primacía por sobre la construcción de un movimiento político- y la inclusión de la figura de un vicepresidente o jefe de gobierno en el nuevo ordenamiento.
La idea es llegar al pleno con el máximo entendimiento posible, incluyendo también a sectores de la derecha, que hasta ahora o no han sido incluidos o terminan marginándose. “Tenemos 16 colectivos y somos todos bastante diversos. Decir que un grupo o dos están liderando esto es no rendir el valor que corresponde a la articulación amplia de distintos sectores, donde todos tienen que ceder algo”, dijo la presidenta de la Convención, María Elisa Quinteros.
Si bien la gran mayoría del informe de Sistema Político fue rechazado para intentar el mencionado acuerdo, la comisión ad hoc sí integró al borrador de la nueva Constitución dos artículos importantes para los pueblos originarios: la plurinacionalidad y libre determinación de los pueblos, que consagra a Chile como un Estado plurinacional e intercultural; y la garantía del Estado para la participación de los pueblos indígenas en el ejercicio y distribución del poder, e incorporando su representación a todo nivel.
Si bien la mesa de la Convención activó la prórroga de tres meses -el proceso terminará el 5 de julio- todas las comisiones trabajan contra el tiempo. Esto porque, en principio, el 16 de abril es la fecha final de despacho de los informes a votación del pleno, que tiene hasta el 16 de mayo para enviar el borrador de la nueva Constitución a la Comisión de Armonización. Hasta ahora, los tiempos se mantendrán así hasta nuevo aviso.
Un respiro para Medio Ambiente
Buscaron acuerdos en el arco progresista y consiguieron su objetivo. La comisión de Medio Ambiente y Modelo Económico logró aprobar casi en su totalidad los informes de reemplazo que enmendaron el fallido primer intento en la votación del pleno de la Convención.
El viernes 25 fueron aprobados los artículos que hacen referencia a los derechos de la naturaleza, la gestión de residuos, la protección de los animales -que reconoce la “sintiencia” y el derecho a vida libre de maltrato-, la protección de la biodiversidad y los principios junto con la democracia ambiental. Esto se suma a los artículos que comprometen al Estado en la lucha contra el cambio climático, llegando a ocho normas incorporadas al borrador de la Constitución. “Somos el segundo país en el mundo que consagra los derechos de la naturaleza a nivel constitucional (…) Esta Constitución empieza desde hoy a ser ecológica y esta comisión demuestra que es capaz de sobreponerse a todas las críticas”, dijo el coordinador, Juan José Martin, al finalizar la votación.
El éxito, sin embargo, no fue completo. Nuevamente, los artículos sobre los bienes comunes no alcanzaron el quórum suficiente (85 votos a favor, 54 en contra y 12 abstenciones) y retornaron a la comisión. A varios de los convencionales no los convence esta definición: “Los bienes comunes naturales son elementos o componentes de la naturaleza no susceptibles de apropiación”. Para los ecoconstituyentes, en cambio, la definición de los bienes comunes es fundamental para su compromiso con comunidades y organizaciones ciudadanas.
Por eso, comentan en privado, los ecoconstituyentes insistieron con una redacción más corta del texto, que no fuese tan específica como la anterior, y con espacio para la regulación vía ley. Sin embargo, de igual forma fueron incluidos preceptos que no tienen consenso en el pleno. “El Estado es custodio de estos bienes, debiendo conservarlos, resguardarlos y administrarlos, asegurando una gestión participativa y democrática”, es uno de los incisos que regresaron a comisión. Está por verse cuál será el futuro de estas normas en particular.
¿Qué viene ahora en Modelo Económico?
La comisión de Medio Ambiente y Modelo Económico volverá a sesionar el martes 29, último día para la recepción de indicaciones en los bloques que faltan. Entre ellos está todo lo relacionado a los sectores productivos -minería, agua, concesiones, empresas públicas, nacionalizaciones, tratados internacionales, entre otros- lo que tiene en alerta al sector empresarial.
En el bloque de deliberación destinado al Modelo Económico se aprobaron más de 40 artículos, que en los próximos días serán votados en particular, para el posterior envío al pleno. Desde la centroderecha -minoría en la comisión- aseguran que la moderación de los informes de reemplazo no va en línea con las últimas votaciones.
“En la comisión se ha seguido votando una enorme cantidad de normas que tienden a limitar o a hacer inviable la producción asociada a recursos naturales en industria minera, forestal, pesca y la agricultura, lo que nos condena a la mediocridad económica (…) Esta sensación de que había una moderación en lo que se aprobó no es real, sigue habiendo graves problemas en lo que se sigue aprobando”, afirmó Bernardo Fontaine, convencional de Vamos por Chile.